Samantha La Belleza
Con esta obra quise capturar algo que nunca pasa de moda:
Que la verdadera belleza no siempre necesita mostrarse por completo. Samantha la Belleza es misteriosa, elegante y silenciosamente poderosa.
Sus ojos están cubiertos-porque a veces, no mostrarlo todo nos hace aún más fascinantes. Dicen que los ojos son la ventana del alma, pero yo creo que una mujer tiene todo el derecho de guardar una parte de sí misma, de mantenerse en lo sagrado y lo íntimo.
Sus labios rojos hablan por sí solos-expresan confianza, feminidad y sensualidad, sin necesidad de decir una palabra. Su ropa, semitransparente pero sin mostrarlo todo,refuerza ese equilibrio: fuerza y suavidad,presencia y reserva.
Creo firmemente que cuando una mujer lo muestra todo de inmediato, la magia se desvanece. El misterio no es esconderse es elegir qué revelar, y cuándo.
Samantha la Belleza nos recuerda que el encanto verdadero vive en lo que se siente,no solo en lo que se ve. A cada mujer le digo:
No tienes que mostrarlo todo para ser poderosa.
No necesitas ser ruidosa para ser inolvidable.
Deja que tu misterio sea parte de tu belleza.